Hace unos años un simpático judio superdotado (conste que me da bastante igual que sea judio, muy listo o la tenga grande) creó una red social que se la sacó de la manga básicamente para follar en la universidad.
Muy bonito y desinteresado pero ¿alguien se paró a pensar si iba a funcionar o no? Lo digo porque una página donde tus “amigos” pueden subir y etiquetarte en fotos, en lamentables estados de embriaguez o gilipollez o las dos juntas, podrá jamás ayudarte a follar. Porque esos seres a los que tu consideras “amigos” nunca colgarán fotos tuyas cuando vayas de excursión a Riopar ni a ver a la Dama de Elche ni tampoco cuando vayas a hacer labores sociales a un hospital con discapacitados…¡no! Los muy cabrones pondrán las fotos en las que salgas:
a) bebiendo cerveza como un camionero
b) haciendo la imbécil en algún cumpleaños
c) en la cama durmiendo borracha como un zote
d) todas las anteriores juntas
A pesar de lo traumático que resulta que tu prima la perfecta y la fotogénica de la familia te vea en condiciones tan deplorables, siempre habrá algo mucho peor… que te vea el tío que te gusta. Porque todas lo tenemos en nuestra lista de amigos:
-Tía está Juan Navarro el camarero popi tan mono… no seas tonta ¡envíale la solicitud de amistad!
Y lo haces sabiendo perfectamente que te va a ver en las fotos del cumpleaños playero de tu amiga Silvia hecha un orco,con el rímel corrido y la cabeza como El Rey León por culpa de la humedad. Si a estas alturas estás avergonzada ¡tranquila! hay cosas más humillantes como por ejemplo que él le dé a “Me gusta”.
Pero lo peor a veces no son las malas fotos sino las “buenas”. Los shootings improvisados en el baño donde tú eres la fotógrafa y la estrella a la vez. Sesiones de media hora en las que posas creyendo que eres la reina del porno local, donde las toallas naranjas del baño de tus padres no tienen lugar y te las ves putas para no sacarlas en la foto:
-¡Mierda en esta foto parezco Sasha Grey pero se ve el albornoz de mi hermano!
Luego haces criba, subes la que tú crees que está mejor y con la que probablemente te conviertas en la mujer más atractiva de las redes sociales (o con la que pudieras conseguir más solicitudes de amistad de tíos) y a la hora descubres con la mayor amargura del mundo que NADIE te ha dicho nada de tu nueva foto de perfil. ¡Qué difícil es follar en internet!
Una vez olvidado el trauma de las fotos deberíamos centrarnos en lo que puede darnos el verdadero éxito a la hora del ligoteo: La situación sentimental.
-¿Situación sentimental? ¡Desesperada por calzarme al morenazo que hace cortos y que me pone a tope!
-Desesperada no está,nena. Puedes elegir entre Soltera, Tiene una relación, Casada, Viuda y Es Complicado…
¿Es complicado? ¿Qué coño significa eso?
Si lo pensamos bien, lo realmente complicado es encontrar algo decente dentro de Facebook. Están los tipos que posan en camiseta sin mangas (atrocidad al cubo) y con gafas de sol de piloto como diciendo que son los más guapos de la galaxia. Pequeños hombrecillos horteras que piensan que el súmum de la elegancia europea se encuentra en Cristiano Ronaldo. También están los que, y esto es aplicable a las mujeres también, ponen una foto de su ojo… Tipos que se presumen más profundos que los primeros pero que en realidad son la misma mierda con distinto olor. Asimismo encontraremos a los que prefieren poner una foto de algún dibujo de su feliz infancia ochentera… sin duda son los que más misterio le ponen al asunto puesto que no les pones cara y te entra la curiosidad: “La Lotería del Amor” tienes un cincuenta por ciento de que esté bueno y un cincuenta por ciento de que sea un orco, no hay más.
Un aspecto terrible de toda la historia es que acabas desarrollando la muy bien conocida “Psicopatía Femenina”, me explico. Hay un tío que te gusta mucho, es guapo a morir, lee lo mismo que tú, le gusta el cine iraní y vete tú a saber la de chorradas que tienes en común con él. Bien, desde el mágico instante que os convertís en amigos solo tendrás una misión que te quitará la vida: Mirar en su muro constantemente para ver lo que se cuece.
Pablo es ahora amigo de Marta y de seis tías más. ¿Seis? ¿Quién coño es Marta? ¿Realmente hay tías tan horteras con el nombre de “Dulcecita Estrella? ¿Se las habrá tirado a todas? ¿Estarán fisgoneando como yo en su muro?
Y estallas como una bomba, día y noche entrando a comprobar si la tal “Dulcecita Estrella” (que seguramente tenga una foto de una muñeca de esas que tienen unos ojos y un cabezón enormes y que son más terroríficas que monas) le ha colgado un vídeo de Love of Lesbian o algo peor… Y te comen los nervios y la ira te invade y te entran ganas de denunciar perfiles.
Y no lo haces, decides ser una mujer elegante y para paliar la competencia decides enviarle un mensaje privado: ¡Ja! Lo voy a petar. Cuidado nena que estás a un paso del ridículo más absoluto.
Durante dos horas te comerás la cabeza sobre lo que deberías enviarle y lo que no. Sobre cómo ser divertida y fresca sin sonar a “memueroportushuesos” y te autoconvences de que lo que tienes en mente es brillante no, más que brillante MAGISTRAL. Y le mandas el mensaje más ridículo a la par que pobre que hayas enviado nunca a nadie:
“Hola!!! Hoy he entrado en una tienda de golosinas y he visto un dispensador de los caramelos que tanto te gustan, gigante!! Y claro, me he acordado de ti”
Un subnormal dijo “cualquier excusa es buena” y yo apostillo “los cojones”
Después de cagarla de semejante manera te vuelves a comer la cabeza durante otras dos horas sobre si se habrá notado mucho la ridícula excusa o no pero tranquila amiguita que me lees con tanta atención, lo más seguro será que él te ignore. Tal vez por cortesía se digne a contestar pero ignorando tu pobre e infantil intento de seducción. Lo peor vendrá después, otros tantos intentos fallidos por reconquistar un terreno ya bombardeado por Martas y chicas con absurdos nombres que intentan evocar a las chucherías y que lo único que evocan es el vómito.
-Aprovecha la Navidad y le mandas un mensaje para felicitársela, tía.
Y le haces caso a tu amiga que lleva seis años con el mismo chico y que no tiene ni idea de intentar follar por las redes sociales. Vuelta a las comeduras de tarro y como solo hace un mes de la cagada del primer mensaje te planteas que a lo peor es demasiado precipitado mandarle otro mensaje. En el fondo lo harás sin poder evitar sentirte como Glenn Close en “Atracción Fatal”. Hasta que él te conteste te sentirás como una terrible acosadora que lo único que hace es intimidar a su Michael Douglas particular. Una mujer desequilibrada y fuera de rollo por completo que lo único que quiere es que le hagan caso un ratito para por lo menos cumplir el deseo de toda la humanidad, follar. Y si consigues unas cañas tampoco está tan mal.
Consejo de amiga: Sal a la calle, vete de bares, busca, rebusca y compara, critica con tus amigas, acércate al morenazo que bebe cerveza, sal a fumar con el rubito de la camisa de cuadros. Tienes muchas más posibilidades de saber si es realmente guapo porque lo puedes ver desde todos los ángulos y con todas las luces, igual puedes descubrir si es listo (con mucha suerte, claro) si tiene novia o simplemente si busca pasarlo bien.
Sí, el mercado está muy jodido pero salir de bares compensa mucho más que buscar la foto de perfil adecuada, los comentarios más ingeniosos, intereses comunes etc… ¡Salir de bares aporta frescura a las posibles relaciones sexuales! ¡A partir de la quinta copa no importa que seas ingeniosa, una zorra de “Jersey Shore” o retrasada!
Seguirá siendo difícil follar, vale. Pero cada vez que cierro el portátil tras varios intentos, nada exitosos, de trincarme a mi amigo el que está bueno (todas tenemos uno) salgo de bares y recuerdo una frase de Kurt Russell en Death Proof “El alcohol solo es un lubricante para los posibles encuentros que nos ofrece un bar”
¿Qué quieres que te diga? El día que Facebook te invite a unos chupitos igual cambia el asunto…
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